miércoles, 26 de abril de 2023

Catalina Valls, actriz y dramaturga

 


Catalina Valls Aguiló de Son Servera (Palma, 1920 – 2010). Estudió Magisterio, una carrera que terminó en 1940. Se formó en el teatro en Barcelona y tras vivir en Madrid, a mediados de los años cuarenta volvió a Mallorca, donde empezó a hacer teatro.

Estuvo siempre muy vinculada al Teatro Principal de Palma, donde participó en numerosos montajes. En 1947, precisamente en el Teatro Principal, representó "La corona comtal", de Aina Villalonga, con la Agrupación de Teatro Regional y bajo dirección de Catina Valls. Más tarde actuó con la compañía Artis con la que participó en los montajes de "El rei Pepet", de Pere Capellà (1954); "s'Estopa ran des foc" (1955) y "Can Miraprim" (1956) de Martí Mayol.

Tras una larga temporada sin actuar, en los años setenta volvió a los escenarios con papeles destacados en obras como "Estrenam llibertat" (1978), de Joan Santamaria; "Aina Sacoma" (1979), escrita y dirigida por Guillem Cabrer, y, en especial, "Mort de dama" (1981), de Llorenç Villalonga, dirigida por Pere Noguera, una obra en la que se consagra en el papel de doña Obdulia. En los años 80 y 90 participó en numerosas producciones teatrales trabajando los más diversos registros y actuó con la compañía Zanoguera-Alfaro en la obra "És na Xima, Xema?", de Mauricio Gallardo.

Domingo 30 de diciembre de 1990, en la Residencia "Sa Nostra" de General Riera, se celebro un concierto, en el que, entre otros, intervinieron la poeta Catalina Gayà, de la que cabe mencionar, ya que siempre estaba agradecida de presentar a Toni Mir, además de recitar algún poema, y las cantantes Amparo Morell y Nieves Cladera , que pusieron las voces en una tarde del todo agradable, además pudimos escuchar voces como Francisco Bosch (Esporles, 1917-2009), con el que Toni a partir de ese momento entabló una buena amistad, y Gabriel Aguilera, al piano Margarita Picó, el poeta Antonio Salas y la inigualable actriz Catalina Valls (Palma, 1920-2010 ). Una bonita anécdota de esta velada tuvo como protagonistas nuestra querida Catalina Valls y Toni Mir; el dedicarle este el Bolero de Calatayud, ya que nuestro querido maestro una vez y mediante el teléfono le había dedicado la misma obra. Hay que señalar la sorpresa por parte de Toni y la alegría que supuso para Catalina.

También representó varias obras de Villalonga como "Desbarats" (1992) o un nuevo montaje de "Mort de dama" (1998), también dirigidos por Pedro Noguera. Además, destacaron sus papeles en obras "Es cançons de mestre Lluc", de Bartomeu Ferrà; "La nodriza", de Salvador Galmés; "Els muts", de Antoni Mus o "Don Ventura veraneo", de Luis Segura. También hizo teatro en castellano en obras como "La enemiga", de Darío Niccodemi, o "La muralla", de Joaquín Calvo Sotelo.

Catalina Valls cultivó la poesía, que publicó en varias revistas, la narrativa con obras como "Mármol en llamas", "La otra comedia" y "Aquella placeta dels ginjols", de la que también escribió una versión teatral. De su producción teatral destaca "Amor que renace", que escribió con sólo 13 años; "La forastera de Can Parera" (1947), "Duda" (1950), "Cárcel de silencio" (1953) y "Deseo" (1954).

Recibió reconocimientos como el Premi Ramon Llull del Govern; la Antena de Oro de Antena 3, que le entregó el Grup Serra; la Medalla de Oro de la Fundación Miguel Àngel Asturias o el Ars Magna que la Casa Catalana de Mallorca le concedió. En 1995 recibió un homenaje del Consell.

Los últimos años de su vida, Catalina Valls recibió varios premios y homenajes, y, desde su reapertura en 2007, era una persona habitual en todos los estrenos del Teatro Principal.


miércoles, 12 de abril de 2023

D. Nicolas Morey


 Nicolas Morey

Guitarra Nicolas Morey
Violin Nicolas Morey

Don NICOLAS MOREY un buscador de la perfección en el arte de construir guitarras

Don NICOLAS MOREY y ARIAS nació en Palma de Mallorca en el año 1845 en el seno de una familia acomodada. Por parte de su padre eran comerciantes - navieros - armadores. Su abuelo materno tenía un cargo que equivalía a Delegado de Hacienda en Baleares. En el año 1883 su tío Fernando Arias Estrader recibió la condecoración del Toisón de Oro.

El joven Nicolás recibió una adecuada formación y estudios. Fue alumno del colegio de los Padres Franciscanos. Cuando llegó el momento de la elección de colocación optó por Hacienda. Se preparó y obtuvo una plaza; pero la familia Morey se opuso y le hicieron desistir alegando que un señor con tanta riqueza (que luego no fue para él) no debía trabajar.

Este hecho y su inclinación a trabajar la madera y el hueso, hicieron que se dedicara casi totalmente al entretenimiento de hacer pequeños objetos artísticos de madera.

Una apuesta con un amigo suyo, le llevó a construir una guitarra. La madera empleada para el mástil provenía de un remo de una barca.

Esta primera guitarra la cedió a un tío suyo a cambio de unas botas para ir a cazar - Tenía gran afición a la caza y a la pesca

Así empezó su camino de constructor de guitarras, que continuó toda su vida, hasta alcanzar elevados hitos de perfección.

Su acomodada posición social le permitía no tener prisa en su obra. Podía perfeccionar y retocar hasta que el instrumento resultaba la maravilla esperada. Y no sólo en la forma, sino en el sonido. Para ello usaba maderas nobles, cambiaba, combinaba, curvaba y daba nuevas formas - Cada guitarra es distinta.

Para críticos de sus guitarras busca a los mejores guitarristas. Cuando en Palma había concierto, allá estaba él haciendo probar sus guitarras y cambiando impresiones. Era obligado para él que su instrumento le gratificara con optimas vibraciones sonoras. Entre los concertistas que tuvieron en sus manos la obra de don NICOLAS MOREY destacan don ANDRES SEGOVIA que estuvo en su propia casa de El Terreno y don BARTOLOME CALATAYUD.

Las fincas que tenía en Orihuela y Callosa, le obligaban a viajar. En Alicante siempre permanecía varios días intercambiando ideas y asistiendo a conciertos preparados por sus amigos. Las guitarras eran siempre sus compañeras de viaje. Allí puestas en manos de buenos concertistas demostraban su valía.

Se podría decir que es en Alicante donde se aviva más el fuego creador. Si tiene que pasar la prueba del crisol frente a la obra de Don ANTONIO TORRES, la pasa, y queda en igual posición. Sus amigos lo llaman "rey en el arte guitarrero".

Su producción no es muy extensa. Se reduce a unas trece guitarras, una bandurria y un violín.

Regaló una guitarra a un tío suyo y otra la regaló al médico de la familia Dr. don Francisco Sancho, que fue la que más tarde consiguió don Bartolomé Calatayud y la guardaba cuidadosamente para los conciertos, creemos que esta guitarra la posee un coleccionista madrileño.

Como no le interesaba vender ningún instrumento los guardaba y mimaba en su casa. Con un admirable tesón los perfeccionaba, añadía elementos, escuchaba nuevas vibraciones y se deleitaba con la música de sus guitarras. Ahora bien, gozaba enormemente cuando las prestaba a quienes supieran hacer brotar de su interior las expresiones y lamentos más vivos y dignos de tal realeza.

Don NICOLÁS MOREY falleció en Palma el día 2 de Marzo de 1933. Su obra se mantiene en parte. Ocho guitarras, la bandurria y el violín. De las otras desconocemos su paradero. El no la divulgó, ni sus hijos tampoco; pero sus nietos la damos a conocer a todos los aficionados a la GUITARRA ESPAÑOLA.

Estos datos nos los ha facilitado nuestra madre, su hija, Dª AMELIA MOREY FERRER.

A continuació transcrivim una poesia dedicada a Don Nicolau Morey por don Francisco Rodríguez, empleado de la Audiencia Provincial de Alicante. A l'esquerra podem veure l'original d'aquest document.

A
DON NICOLÁS MOREY y ARIAS

Aunque Andaluz no exagero
al decir que considero
a Don Nicolás Morey
como un Rey
en el arte guitarrero.

Don Nicolás, es rentista,
hijo y vecino de Palma
hombre que salta a la vista
que es de alma
y de madera de artista.

O artista de la madera
que es como mejor se ajusta
dicho así de esta manera,
Si en su esfera
hacer guitarras le gusta.

Puesto que con ocasión
de sentir grande afición
por la española vihuela,
tal se encela,
que pone una en construcción.

La que una vez construida
el día que la puso en uso
al ser del público oída,
éste, iluso,
aplaudió su obra atrevida.

Mas después de esto es lo cierto
que hizo otras guitarras varias,
con tal arte y tal acierto,
extraordinarias,
primeras para el concierto.

Torres, aquél renombrado
hizo una en condición tal,
que jamás había encontrado
su rival,
en el mundo en ningún lado.

Y esta guitarra que tiene
nombre en la raza canina,
sin pensar a poder viene
en "La China",
de Don Nicolás Giménez.

Mas un día frente a esa
que como Leona se crece,
en el mundo con sorpresa
le aparece
una rival, "La Tigresa".

Otra alhaja y maravilla
que con su eco emociona
y no la deja en mantilla
ni la humilla
la tan famosa Leona.

Pues, si el nombre de una fiera
por el sonido y la traza
a una guitarra se diera,
ya tuviera
Morey, la canina raza.

Porque posee allá las trece
que por sus voces se vé,
que cuales quiera estremece
y merece
hombre de fiera se dé.

Y entre todas la más buena
riñó con la Leona adversa
resultando de la escena,
no refrena
por ser de la misma fuerza.

Por lo que la constructora
de la guitarra grey,
hoy se encuentra y se asegura
a la altura
de Antonio Torres, Morey.

Si Torres comercio tiene,
y por él suena en el mapa,
á Morey no le conviene,
claro, y tapa
su modestia que resuene

Por lo que yo no exagero
cual Andaluz; considero
a Don Nicolás Morey
como un Rey
en el arte guitarrero

Alicante, Junio 1.922