Este
fuerte o castillo, colocado en la punta llamada del Castell, entre la Cala
Blanca y Vol del Pi y bien emplazado para defender el fondeadero de desembarco
es obra del siglo XIV, lo mismo que los del puerto de Andraig y el de la
Palomera o San Elmo, empezado por Real disposición del Rey de Mallorca Don
Jaime III, y concluido por disposición del Rey Don Pedro IV de Aragón.
No
solo ha estado más bien conservado que los otros dos mencionados sino que
permite estudiar mejor la forma y construcción antigua de semejantes
monumentos, toda vez que no sufrió la reforma de aumentarle los pisos que se
añadieron a aquellos últimos del siglo XVI, como hemos visto, para dotarles de
cañones de artillería. Este, aunque fue también artillado, no se le modificó
más que con la abertura de las aspilleras.
En
1867, estaba dotado con 3 cañones de hierro de gran calibre, de a diez y ocho,
doce y cuatro. Estaba servida 1.º por
baile y dos guardias a quienes sustituyeron después dos torreros hasta el año
1867[1].
[1]
Fascículo núm. 84, pág.
496-497. HISTORIA DE LA BARONIA DE LOS Señores Obispos DE BARCELONA EN MALLORCA.
PALMA- Escuela Tipográfica Provincial 1920.
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